¿Cómo empezar a hablar un idioma estudiando 5 minutos al día?

¿Crees que lo de aprender un idioma en 5 minutos no es más que un truco de marketing? Nuestro experto en lingüística contesta a la pregunta de por qué gracias a la aplicación FAST PHRASES empezarás a entender un idioma dedicándole al estudio entre 5 y 20 minutos al día.

¡Lee cómo nuestros expertos ayudaron a Javier a aprender inglés!

Trabajo como vendedor en Fast Phrases. Casi todos mis compañeros de trabajo hablan varios idiomas. Hasta hace poco, mi conocimiento de idiomas quedaba a la altura del betún comparado con el suyo. No sabía ni papa de ningún idioma, mientras que mis colegas bromeaban en todos los idiomas del mundo.

Como a la mayoría de los españoles, me cuesta aprender un idioma. Tuve clases de idiomas en el colegio, pero no me sirvieron de nada. A pesar de empollar gramática a saco, no sabía absolutamente nada. Hasta el experimento con Kate, lingüista de Fast Phrases, tenía miedo de hablar otro idioma. Me daba vergüenza que alguien se diera cuenta de mis errores y se riera de mí.

Cuando me propusieron el ascenso, me pregunté cuánto tiempo necesitaría para aprender inglés. ¡Sobre todo teniendo en cuenta que la empresa me iba a mandar a Londres a un curso de casi dos semanas! Por suerte, mi empresa me puso en contacto con la lingüista de Fast Phrases, Kate.

Ahora sé que aprender un idioma no tiene nada que ver con tener una gramática o un acento perfectos. Kate me enseñó a adoptar ese enfoque. Me mostró que no había ni una sola persona entre los alumnos de Fast Phrases, ni siquiera los más entusiastas, que se dedicase a empollar con libros de texto.

Me senté a hablar con Kate Miller, lingüista de Fast Phrases, que me explicó por qué necesito entre 5 y 20 minutos de estudio al día para dominar un nuevo idioma.

Los alumnos de primaria y secundaria dedican de media dos horas a la semana a aprender inglés. En teoría están en una edad en la que los idiomas "entran" más rápidamente y los niños cuentan con una enseñanza profesional. Sin embargo, pocos alumnos acaban el instituto sabiendo hablar un idioma. .

¿Cómo es posible que con la aplicación Fast Phrases baste con 15, 10 e incluso 5 minutos de estudio?

La filosofía de Fast Phrases

Quedé con Kate para que me explicara la filosofía básica del aprendizaje según Fast Phrases. Me explicó que no necesito un montón de libros de texto ni dedicarle muchas horas a estudiar.

"Un exceso de información abruma al cerebro, el cual deja de asimilar conocimientos nuevos. Esto se conoce como sobrecarga de información. Es el mayor inconveniente de la mayoría de métodos de aprendizaje de idiomas", dijo Kate. "La sobrecarga de información es responsable de la falta de progreso a pesar de las muchas horas de estudio. También por eso la mayoría de nosotros no sabe decir una frase completa en inglés a pesar de tener entre 3 y 5 horas de inglés a la semana en el colegio".

Además de la sobrecarga de información, nuestro cerebro se ve atacado por verborrea de todo tipo. El cerebro humano clasifica la información que se le bombardea en importante e innecesaria. Así pues, elimina la información menos importante, es decir, en vez de introducirla en la memoria a largo plazo, la mantiene en la memoria a corto plazo y después la destruye. Por eso no te acuerdas de lo que desayunaste hacer una semana ni de cómo se dice "servilleta" en inglés.

Entonces, ¿cómo deberíamos estudiar para que el nuevo material llegue directamente a la memoria a largo plazo?

En vez de memorizar varias cosas a la vez, es mucho más eficaz repasar poca información pero más a menudo.

En primer lugar, gracias a ello el cerebro no asigna la información nueva al montón irrelevante.

En segundo lugar, se aplica la regla de fragmentación. ¿Qué significa esto? El cerebro funciona mejor si absorbe al mismo tiempo 7 elementos de una tacada. Por eso en la aplicación Fast Phrases se ha dividido el material de estudio en sesiones de 5 minutos que te permiten memorizar información repetida.

Los mejores resultados se consiguen con entre 3 y 5 sesiones al día. ¡Da igual dónde! ¿En la pausa para comer? ¿En el bus al trabajo? ¿En la cola del súper? ¡Solo necesitas 5 minutos para disfrutar de una sesión de estudio! ¿A que es fácil?

Un algoritmo que da resultados

Dividir el material en sesiones tiene otra ventaja. Repetir pequeñas dosis de material ayuda a almacenarlas en la memoria a largo plazo. Fast Phrases tiene un método que intensifica este proceso ¿Cuál es?

Las expresiones y palabras se repiten durante un tiempo calculado por un algoritmo que se adapta a tu ritmo de estudio. Si enciendes la aplicación y finalizas varias sesiones de estudio, te darás cuenta de que además del material nuevo, algunas palabras se repiten. Ese es el material que todavía tienes que dominar.

El algoritmo comprueba, por ejemplo, la frecuencia con la que confundes términos, si te acuerdas de palabras concretas o cómo de fácil te resulta construir frases. Aunque recuerdes el lugar donde se encontraba una palabra o imagen, no podrás engañar al algoritmo, ya que la aplicación mezcla las respuestas para que repases bien el conocimiento adquirido con anterioridad.

Por lo tanto, Fast Phrases comprueba que hayas aprendido de verdad

El último consejo de Kate fue estudiar de manera sistemática. "Estudia cada día. Por la mañana o por la tarde, da igual. No tienes que acabar el mismo número de sesiones cada día, aunque recomiendo que estudies como mínimo una por la mañana, otra por la tarde y una o dos por la noche. Recuerda que la clave del aprendizaje está en la práctica diaria".

Las explicaciones de la lingüista me tranquilizaron. Me entraron ganas de estudiar y recobré la esperanza de aprender inglés al fin. Seguí todos los consejos de Kate y encendí la aplicación Fast Phrases en cualquier momento libre. ¡Increíble lo rápido que empecé a ver resultados! A las dos semanas volé a Londres para la conferencia. Estudié un poco más en el avión.

En el aeropuerto me estaba esperando un compañero de la oficina de Londres. Cuando le saludé en inglés y empezamos a hablar, dejé de sentir estrés alguno. ¡Estaba hablando inglés! ¡Lo había conseguido!